Una vez mas traigo a estas paginas una recomendación cinematográfica, otra vez encontrada de casualidad rebuscando en mi video club, tratando de encontrar algo que merezca la pena o al menos me entretenga. La verdad es que con esta acerté, no había oído nada sobre ella y cuando terminé de verla, la verdad es que me sorprendió. Pero me sorprendió más que cuando, mas tarde, le hablaba de ella a alguien, nadie la conocía. La película toca el siempre espinoso asunto de la pena de muerte. En un país como el nuestro donde, por desgracia, llevamos años sufriendo la lacra del terrorismo y donde cada día la prensa y la televisión nos muestra el peor lado de la condición humana, violencia de género, violaciones, pederastia, robos con extrema violencia ¿Quién no se ha sentido tentado a admitir los beneficios de la pena capital? Teóricamente vivimos amparados por nuestra Constitución y por La Carta fundamental de los Derechos Humanos, que reconocen el derecho a la vida tanto para el alma más inmaculada como para el más detestable de los asesinos. Puede resultar incomprensible cuando eres la victima o para sus allegados, pero también es una garantía si eres inocente. En Estados Unidos, uno de los países con más número de ejecuciones, el estado de Nueva Jersey, ha sido el primer estado en prohibir la pena capital en cuarenta años, sustituyéndola por cadena perpetua, afirmando que es cara,
discriminatoria, inmoral y bárbara. Algunos países creen en este sistema como un buen instrumento represivo, por su innegable carácter irrevocable, pero lo que está claro es que la justicia humana puede fallar y por lo tanto cometer errores y costarle la vida a algún inocente que no tenga dinero suficiente para pagar a un buen abogado. Del director Alan Parker (“El expreso de media noche” “Arde Mississipi”) La vida de David Gale creo que plantea el asunto de una forma original e inteligente manteniendo la expectación durante toda la película. Utiliza el “Flash Back” o saltos en el tiempo, pero sin hacer que te pierdas. Esta es mi modesta opinión de espectador, porque los críticos no dudaron en poner en duda su calidad, pero creo que lo mejor es verla y valorarla uno mismo. Con Kevin Spacey y Laura Linney en los papeles más emocionales y con Kate Winslet descifrando misterios, creo que la película merece la pena. Si os gusta el tema también podéis buscar “El verdugo” de Berlanga (1963) “Pena de muerte” de Tim Robbins (1995) “Ejecución inminente” de Clint Eastwood (1999) o “La milla verde” de Frank Darabont (1999). La ilustración es de PLANTU. Derechos humanos: Preguntas y respuestas. Bakeaz / Ediciones UNESCO 1998
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